martes, agosto 05, 2014

¡EL PODER DE LA ALABANZA !

“Dios, Dios mío eres tú; de madrugada te buscaré; mi alma tiene sed de ti, mi carne te anhela, en tierra seca y árida donde no hay aguas, para ver tu poder y tu gloria, así como te he mirado en el santuario. Porque mejor es tu misericordia que la vida; mis labios te alabarán. Así te bendeciré en mi vida; en tu nombre alzaré mis manos. Como de meollo y de grosura será ...saciada mi alma, y con labios de júbilo te alabará mi boca”
Sal. 63:1-5-
¿Quieres ver la gloria de Dios? ¿Quieres estar cerca de Él? A través de la alabanza, podrías llegar hasta su trono y al lugar de su más íntima presencia. Deberíamos alabar al Señor, porque la alabanza es una cura para la sequía espiritual. Dios nos ha creado de tal manera que tenemos sed de Él. Cuando pretendemos que las cosas y las personas de esta tierra sacien nuestra sed, nos secamos y nos decepcionamos. Pero cuando levantamos nuestros ojos a Él en alabanza, nuestro corazón se llena. Un día, cuando David se estaba escondiendo del rey Saúl en el desierto de Judá, y se sentía seco y necesitado, descubrió este poderoso secreto: -
¿Estás espiritualmente seco (a ) y sediento (o ) ?
Comienza a ala­bar al Señor, y Él te llenará de sí mismo hasta que tu sed se sacie y tu copa rebose.
"Deberíamos alabar al Señor, porque la alabanza derrota a Satanás." Satanás odia la alabanza, porque odia a Dios y odia todo lo que exalte o agrade a Dios.
Una de las estrategias de Satanás es hacer que nos centremos en nosotros mismos; en nuestras necesidades, nuestros problemas, nuestras cir­cunstancias, nuestros sentimientos. Cuando alzamos nues­tros ojos, aunque estén llenos de lágrimas, y decidimos ala­bar al Señor, el plan de Satanás es destruido, y Dios gana la victoria en nuestra vida.

No hay comentarios: