lunes, marzo 13, 2017

¡¡ LA VIDA !!

Hemos sido regalados con el don de la vida. Todos los que leen esto, pueden confirmar que están vivos, y están entendiendo lo que leen.
Pasamos por la vida, atendiendo lo que sea necesario para cubrir nuestras necesidades básicas y resolviendo las situaciones que se nos presenten.
En el fondo, es lo que la Palabra de Dios llama:
temor a la muerte y todo temor nos lleva a esclavitud
Hebreos 12:15
. ¿A qué tipo de esclavitud?
Pueden ser diferentes tipos de esclavitud, pero me gustaría referirme a trabajar demasiadas horas y desatender a nuestros seres queridos y relaciones más cercanas.
Eclesiastés 8:6 “
Porque para todo lo que quisieres hay tiempo y juicio…”
Es curioso, allí nos dice que hay tiempo para todo lo que queramos. Sin embargo, nos quejamos de que no tenemos suficiente tiempo. Eso puede deberse a que no estamos distribuyendo bien el tiempo o a que tenemos demasiados quehaceres y realmente, quedamos cortos de tiempo tratando de cumplir con cada compromiso.
Eclesiastés 8:8
“No hay hombre que tenga potestad sobre el espíritu para retener el espíritu, ni potestad sobre el día de la muerte…”.
Nadie sabe cuánto tiempo hemos de vivir.
La muerte puede llegar de manera súbita para alguien que está sano y bueno…o aun cuando una persona esté muy enferma,
a veces se recupera de algo incurable o serio y sigue viviendo.
Hacemos planes y solemos decir:
“Nos vemos mañana”, etc. sin saber a ciencia cierta si realmente estaremos vivos.
Santiago 4:13-15 “
¡Vamos ahora! los que dicen:
Hoy y mañana iremos a tal ciudad, y estaremos allá un año,
y traficaremos, y ganaremos; cuando no sabéis lo que será mañana. Porque ¿qué es vuestra vida? Ciertamente es neblina que se aparece por un poco de tiempo, y luego se desvanece.
En lugar de lo cual deberíamos decir:
Si el Señor quiere, viviremos y haremos esto o aquello”.
Lo importante es reconocer, no olvidar, y estar agradecidos,
porque nuestra vida depende de Dios.
Hay algo para lo que los seres humanos a veces no estamos preparados: para enfrentar es la muerte.
No necesariamente la nuestra. A veces, cuando un ser querido fallece, algunos dicen: “No le dije que lo amo”;
o “No le demostré cuánto lo aprecio”
. Pues, el tiempo es ¡ahora!…mañana puede ser muy tarde.
Las cosas más dulces de la vida son gratis y están delante de tus ojos. Debes detenerte a oler las rosas;
debes contar tus bendiciones todos los días.
Descubrirás que el camino al cielo será rocoso y difícil,
si no te detienes a oler las rosas a lo largo del camino.
Antes de salir de tu casa esta mañana,
¿pasaste tiempo con tu familia?
¿Abrazaste y amaste a tus hijos tiernamente?
¿Alguna vez caminaste por el bosque,
y te detuviste a soñar entre los árboles?
Bueno, podrás mirar hacia arriba y ver el cielo a través de las hojas.
Casi, casi puedes escuchar la voz de Dios en cada brisa.
Las relaciónes interpersonales son tan importante,
que Dios lo considera como el segundo mandamiento
El amar a nuestro prójimo…a los más cercanos a nosotros, porque
¿de qué sirve ayudar al necesitado que está más lejos,
si descuidamos a un ser querido que nos necesita?
Aunque es necesario hacer lo primero;
lo segundo tiene prioridad.
Empecemos por los pequeños detalles. Por ejemplo, a veces perdemos preciosas oportunidades de “sembrar vida” a los demás. El trato que damos a los demás es muy importante.
Aprendamos a tratar a las personas de manera respetuosa y adecuada. Si lo hacemos, recibiremos lo mismo de vuelta, pues lo que uno siembra, eso cosechará
Gálatas 6:7.
La vida es muy corta. Claro que, el tiempo ha pasado
todavía uno no se da cuenta de que los años pasan muy rápido. Cuidemos nuestro espíritu
(buena relación con Dios y Su Palabra);
nuestra alma (manteniendo emociones y sentimientos bajo el control del Espíritu Santo);
nuestro cuerpo (buena alimentación, ejercicios, descanso).
Hagamos que valga la pena vivir la vida y sobre todo, dejemos un legado de honra a la siguiente generación.
Dios Nos Bendice