martes, marzo 27, 2012

¡¡LA LENGUA!!

Cantares 4:3 Tus labios como hilo de grana, Y tu habla hermosa…
¡¡LA LENGUA!!

Quizás nunca la hemos considerado en términos de atractivo y belleza, tal vez no la miremos a menudo en el espejo.
Es probable que no se compren adornos para ella.
No se tiene ninguna cita mensual con el dermatólogo para embellecerla.
Ni Avón. Ni Ponds. Ni Elizabeth Arden, ni Kelvin Claine. Ni ninguna empresa de cosmetología vende algo para ella.

No se tiene que guardar dieta para disminuir su tamaño, los hombres no la piropean, ni le silban, ni escriben poemas acerca de ella.
No aparece en las revistas de moda, aunque se halla oculta detrás de muchas caras bonitas.
Creo que usted ya percibió acerca de quién estoy hablando.
Precisamente de la lengua.

La lengua más que la forma de nuestro rostro, o las dimensiones de nuestra figura, o la abundancia y variedad de nuestro guardarropa, o las fragancias que utilicemos o el peinado que acostumbremos, es la que determina si somos o no una persona hermosa.
El rey Salomón no era ningún puritano en sus declaraciones y juicios acerca de la belleza; sin embargo, en el Libro del Cantar de los Cantares, rinde tributo a la belleza de la lengua, diciendo; 4:3 Tus labios como hilo de grana, Y tu habla hermosa…
De manera que la lengua puede hacer de cualquier persona ordinaria, una persona hermosa.
La lengua puede suavizar temperamentos agitados.
La lengua puede dar ánimo, consuelo, fortaleza y esperanza al alma afligida, al alma enferma, al alma atribulada.
La lengua puede señalar el camino a Dios, la Biblia se refiere a la lengua como al timón de un barco, el cual aunque relativamente pequeño controla enteramente la dirección de la gran embarcación, 
Santiago 3:4 
Mirad también las naves; aunque tan grandes, y llevadas de impetuosos vientos, son gobernadas con un muy pequeño timón por donde el que las gobierna quiere.
La Biblia también la compara al fuego, que con una pequeña chispa puede crear un gran incendio, este puede ser un pequeño chisme, el cuál al ser contado puede incendiar a toda una familia, o aun incluso a la iglesia misma,
Proverbios 26:20 
Sin leña se apaga el fuego, Y donde no hay chismoso, cesa la contienda. Si no hay leña, el fuego se apaga; si nadie divulga chismes la contienda cesa.
Esa pequeña chispa también pudiera ser la persona que poco a poquito comienza a querer pelear, comienza con una pequeña ofensa, y de ahí abre su boca ya no con pequeñas chispas de fuego sino con un enorme lanzallamas, en lugar de cristiano redimido, para un Pirómano destructivo.
Salmo 57:4
Mi vida está entre leones; Estoy echado entre hijos de hombres que vomitan llamas; Sus dientes son lanzas y saetas, Y su lengua espada aguda.
Que tremenda descripción nos da la Escritura acerca de algunos hombres, los cuales cuando abren su boca salen destrucción, maldiciones, , personas que traen el arsenal por dentro, que traen el mismo infierno dentro de ellos por ello cuando hablan solo maldicen, lastiman, denigran, solo critican.

¡Ay hermana! Qué exagerada eres, como va a traer uno el infierno por dentro, Santiago 3:5-6 
Así también la lengua es un miembro pequeño, pero se jacta de grandes cosas. He aquí, ¡cuán grande bosque enciende un pequeño fuego! 
Y la lengua es un fuego, un mundo de maldad. La lengua está puesta entre nuestros miembros, y contamina todo el cuerpo, e inflama la rueda de la creación, y ella misma es inflamada por el infierno. 
También la lengua es un fuego, un mundo de maldad. Siendo uno de nuestros órganos, contamina todo el cuerpo y, encendida por el infierno, prende a su vez fuego a todo el curso de la vida.
La lengua es un fuego, y es un mundo de maldad; rige nuestro organismo y mancha a toda la persona: el fuego del infierno se mete en ella y lo transmite a toda nuestra vida.
Fijarnos bien, la lengua rige nuestro organismo, regir es sinónimo de mandar, de gobernar, de presidir, y dice que mancha a toda la persona y yo le agrego y mancha a todas las personas, la lengua tiene ese poder y dígame si no es así.

Las personas de lengua larga pueden manchar la reputación de a quién han puesto en su mirada, no importa que para ello utilicen la mentira, 
mire lo que dice en su primera parte Jeremías 9:3 Hicieron que su lengua lanzara mentira como un arco…
Lamentablemente sus saetas suelen llegar muy lejos aun, a personas que ni siquiera conocen, pero que alguien la escogió para despedazarla. Luego cuando quieren reparar su infamia ya es muy tarde.
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Santiago 3:9-12 La Lengua:
Con ella bendecimos al Dios y Padre, y con ella maldecimos a los hombres, que están hechos a la semejanza de Dios.
De una misma boca proceden bendición y maldición. Hermanos míos, esto no debe ser así. 
¿Acaso alguna fuente echa por una misma abertura agua dulce y amarga? Hermanos míos, ¿puede acaso la higuera producir aceitunas, o la vid higos? Así también ninguna fuente puede dar agua salada y dulce.

De ninguna manera tenemos que acostumbrarnos a las malas expresiones o maldiciones, porque cada uno de nosotros vamos a dar cuenta de las palabras que salen de nuestra boca, Mateo 12:33-37 O haced el árbol bueno, y su fruto bueno, o haced el árbol malo, y su fruto malo; porque por el fruto se conoce el árbol. 34 ¡Generación de víboras! ¿Cómo podéis hablar lo bueno, siendo malos? Porque de la abundancia del corazón habla la boca. 35 El hombre bueno, del buen tesoro del corazón saca buenas cosas; y el hombre malo, del mal tesoro saca malas cosas. 36 Más yo os digo que de toda palabra ociosa que hablen los hombres, de ella darán cuenta en el día del juicio. 37 Porque por tus palabras serás justificado, y por tus palabras serás condenado.
Lamentablemente algunos no saben esto, pero por cada palabra que hablemos tendremos que rendir cuentas.
Una persona mala, buscará la manera de herir con sus palabras y no conforme con ello; tratará de devastar totalmente a la gente que lastima. Esa persona hablara con aparente dulzura para que usted escuche con atención, pero su objetivo es destruirle, esa persona aunque le hable amigablemente, por dentro ella le odia, y buscará hacerle pedacitos;
Proverbios 26:28 La lengua falsa atormenta al que ha lastimado, Y la boca lisonjera hace resbalar.

Usted y yo decidimos como usar la lengua, o bendecimos o maldecimos, o alabamos o criticamos: Las expresiones verbales que utilizamos para dirigirnos a una persona pueden manifestar una profunda valoración o una desquiciante degradación. Cuando Pablo inicia su carta a Filemón, llamándolo “amado”, no estaba utilizando un ardid diplomático para ganarse su simpatía, más bien estaba valorando a su amigo y lo que es más importante, se lo estaba expresando.
Dios Nos Ayude y Nos Bendiga