viernes, julio 29, 2016

¡¡ARMAS PARA LA GUERRA ESPIRITUAL !!

Efesios 6:13-18
nos da una descripción de la armadura espiritual que Dios nos entregà ,
. Debemos estar firmes con :
1= El cinturón de la verdad,
2= La coraza de justicia
3= El Evangelio de la paz,
4= El Escudo de la Fè,
5= El yelmo de la Salvación,
6= La espada del Espíritu, y
7= Orando en el Espíritu.
¿Qué es lo que estas piezas de la armadura espiritual representan para nosotros en la guerra espiritual?
Debemos hablar la verdad contra las mentiras de Satanás. Debemos descansar en el hecho de que somos declarados justos por el sacrificio que Cristo hizo por nosotros.
Debemos proclamar el Evangelio, sin importar cuánta resistencia recibamos.
No debemos vacilar en nuestra Fe, no importa cuán fuertemente seamos atacados.
Nuestra defensa principal es la seguridad de que tenemos nuestra salvación, y el hecho de que las fuerzas espirituales no pueden quitárnosla.
Nuestra arma ofensiva está en la Palabra de Dios, no en nuestras propias opiniones y sentimientos.
Debemos seguir el ejemplo de Jesús en reconocer que algunas victorias espirituales sólo son posibles a través de la oración.
Jesús es nuestro mejor ejemplo para la guerra espiritual.
Observemos cómo Jesús manejó los ataques directos de Satanás: “Entonces Jesús fue llevado por el Espíritu al desierto, para ser tentado por el diablo.
Y después de haber ayunado cuarenta días y cuarenta noches, tuvo hambre.
Y vino a Él el tentador, y le dijo;
Si eres Hijo de Dios, di que estas piedras se conviertan en pan.
Él respondió y dijo:
Escrito está;
No solo de pan vivirá el hombre, sino de toda palabra que sale de la boca de Dios.
Entonces el diablo le llevó a la santa ciudad, y le puso sobre el pináculo del templo, y le dijo:
Si eres Hijo de Dios, échate abajo; porque escrito está:
A sus ángeles mandará acerca de ti, y en sus manos te sostendrán, para que no tropieces con tu pie en piedra.
Jesús le dijo: Escrito está también:
No tentarás al Señor tu Dios.
Otra vez le llevó el diablo a un monte muy alto, y le mostró todos los reinos del mundo y la gloria de ellos, y le dijo:
Todo esto te daré, si postrado me adorares.
Entonces Jesús le dijo: Vete, Satanás, porque escrito está:
Al Señor tu Dios adorarás, y a Él solo servirás.
El diablo entonces le dejó; y he aquí vinieron ángeles y le servían.” Mateo 4:1-11
La mejor manera de combatir a Satanás es la manera que Jesús nos mostró y que fue citando la Escritura, porque el diablo no puede manejar la espada del Espíritu, la Palabra del Dios Viviente.
En resumen,
¿Cuáles son las claves para el éxito en la guerra espiritual? Primero,
que nos apoyemos en el poder de Dios, no en el nuestro.
Segundo,
reprendamos en el Nombre de Jesús, no en el nuestro.
Tercero, protegernos con toda la armadura de Dios.
Cuarto, librar nuestras batallas con la espada del Espíritu –
La Palabra de Dios.
Por último, debemos recordar que aunque libramos batallas contra Satanás y sus demonios, no cada pecado o problema es un demonio que necesita ser reprendido.
“Antes, en todas estas cosas somos más que vencedores por medio de Aquel que nos amó”
Romanos 8:37
Dios Nos Bendice
Orita Ruth